Primera charla: Colegio Casablanca

Juan Yáñez nos presentó en los Salones Parroquiales una conferencia sobre la escuela en la que trabaja: el colegio Casablanca de Elche. Este colegio está compuesto por la etapa de Educación Infantil y la de Educación Primaria con un total de 127 alumnos.

Está situado en una zona con población mayoritariamente extranjera (principalmente musulmana y rumana) y de etnia gitana. Debido a su localización espacial, la tasa de inmigrantes por clase suele ser superior a la media y, además, cuentan con 54 gitanos.

Entre otros rasgos, el colegio se caracteriza por poseer alumnos de incorporación tardía al sistema educativo y una minoría étnica en riesgo de exclusión. Por eso, cuentan con un plan de acogida para favorecer la integración de todos estos niños.

La escuela cuenta con varios espacios destinados a diferentes actividades: aula de psicomotricidad, biblioteca, videoteca, aula de informática, aula de naturales, aula de plástica, etc.

Es imprescindible la labor social que lleva a cabo el centro, gracias a la cual han sido numerosas las publicaciones que han aparecido en los periódicos elogiando su buen trabajo.

Respecto a las becas de comedor, el colegio colabora con distintas entidades y reciben subvenciones que cubren lo que las familias no pueden pagar. Además, el colegio hace un reparto todas las tardes de bocadillos a los niños para sus familias y para ellos, y abren las puertas de su comedor a las 7 de la mañana para dar de desayunar a aquellos niños que no pueden hacer en casa. Por último, en Navidad, dan la dirección de las viviendas de las familias sin recursos y las entidades colaboran mandándoles cajas de alimentos.

En cuanto a las excursiones, la escuela pide colaboraciones para poder llevarse a los alumnos fuera de la ciudad.

El colegio Casablanca lleva a cabo distintos proyectos de innovación educativa, adaptados a las características y necesidades del centro. La innovación educativa es todo aquello que diseñan los profesionales que están en activo para resolver todas las necesidades educativas de la escuela, no solo incorporar las TIC, sino también abrir el colegio antes para que puedan desayunar aquellos alumnos que no tienen comida en casa. Otros de los proyectos que están realizando son los siguientes:

·         Colaboran con WAFAE para ayudar al alumnado extranjero a incorporarse al sistema educativo español.

·         Campamentos de verano en los Salesianos con el objetivo de favorecer la inclusión de niños en riesgo de exclusión social.

·         Prevención de absentismo.

·         Control de la obesidad infantil.

·         Programa para niños rumanos.

·         Proyectos de educación para la paz.

·         Proyecto de lengua castellana para madres extranjeras.

·         Proyecto órdago para evitar y prevenir la drogodependencia.

El colegio Casablanca es un centro con una situación un tanto difícil. Algunos de estos son los hechos que lo demuestran:

Ø  Elevada tasa de absentismo. El centro cuenta con un protocolo de absentismo que comienza a los 15 días de faltar el niño a clase. En este momento, se manda una carta a los padres y se llama a casa para preguntar la razón de su ausencia en clase. Más tarde, intervienen servicios sociales y la policía. En muchas ocasiones, las familias dan falsas direcciones y teléfonos, lo que dificulta la intervención de la policía. Si no se encuentra solución, el caso se deriva a la fiscalía. Los niños con un elevado grado de absentismo deben repetir curso porque no han adquirido los conocimientos propios de ese nivel.

Ø  Tres casos de maltrato infantil con orden de alojamiento. En estos casos, los niños no quieren volver a sus casas y los profesores deben iniciar un proceso de seguimiento, hablando con las familias, servicios sociales y el ayuntamiento.

Ø  Un caso de agresión a dos maestras. Cuando ocurre esto, los profesores en cuestión deben ir a la comisaría y denunciar el hecho.

Ø  Muchas veces los padres se olvidan de ir a recoger a los niños. Los maestros deben quedarse 20 minutos después de clase a esperar que estos aparezcan y si no lo hacen una vez pasado ese tiempo, deben llamar a la policía que se hará cargo de ellos.

Debido a estos motivos, el colegio cuenta con un grupo de transición que consiste en llevar información de los alumnos al instituto en el que van a ingresar cuando pasen a Educación Secundaria.

Juan Yáñez destacó que la realidad del colegio la iremos aprendiendo poco a poco y que es imprescindible la acción social que tendremos que asumir, incluso llegar a desempeñar el papel de padre-madre o amigo del alumno.

“Los problemas de casa se dejan en la valla pero los problemas del colegio se llevan a casa”